Ley de Startups

¿Qué beneficios ofrecerá la nueva Ley de Startups prevista para 2022?

El Consejo de Ministros aprobó el 10 de diciembre de 2021 el Proyecto de Ley de fomento del ecosistema de empresas emergentes, más conocida como la Ley de Startups. Esta ley, cuya entrada en vigor está prevista para mediados de 2022, establece un marco legal diseñado para incentivar la creación de empresas emergentes y atraer inversores a España. Las medidas incluyen mejoras en el ámbito administrativo, fiscal, civil y mercantil, con el fin de impulsar el ecosistema de startups.

Definición y ampliación del concepto de startup

Con esta ley, se establece una definición clara y amplia de lo que se considera una startup. Serán startups aquellas empresas innovadoras, con una antigüedad máxima de 5 años (7 años en sectores como biotecnología, energía e industriales). Estas empresas no deben cotizar en el mercado de valores ni haber distribuido dividendos, y su volumen de negocio anual no puede exceder los 5 millones de euros. Además, la ley introduce la figura del “emprendedor en serie”, permitiendo a los emprendedores beneficiarse de las ventajas de esta ley hasta en tres sociedades diferentes.

Incentivos para los inversores

La Ley de Startups ofrece un régimen fiscal muy favorable para atraer inversiones hacia las empresas españolas. En primer lugar, se incrementa la base máxima de deducción en el IRPF por inversión en empresas de reciente creación, que pasa de 60.000 euros a 100.000 euros anuales, con una reducción del 30% al 50%. Además, las stock options se benefician de una exención fiscal ampliada hasta 50.000 euros, y se flexibilizan las condiciones para la generación de autocartera.

Un beneficio adicional lo obtienen los nómadas digitales, quienes podrán residir en España mediante un visado específico durante 5 años, sujetos al Impuesto sobre la Renta de No Residentes (IRNR). Se simplifican las trabas burocráticas, eliminando el requisito de obtener el NIE para estos trabajadores internacionales.

Ventajas fiscales para startups

Las empresas emergentes tendrán una reducción del tipo impositivo general en el Impuesto sobre Sociedades (IS) y en el IRNR, que pasa del 25% al 15% durante los primeros cuatro ejercicios. Además, se permite el aplazamiento de la deuda tributaria del IS o IRNR durante los dos primeros ejercicios, sin necesidad de garantías ni intereses de demora, por un periodo de 12 y 6 meses, respectivamente. También se elimina la obligación de realizar pagos fraccionados de IS e IRNR durante este mismo periodo.

En cuanto a la Seguridad Social, la ley introduce un incentivo social clave: los emprendedores que mantengan un empleo por cuenta ajena de forma simultánea estarán exentos de pagar la cuota de autónomos durante tres años. Esto los convierte en los únicos autónomos que no deben pagar esta cuota si a la vez están contratados como asalariados.

Por otra parte, la ley prevé la exención de la causa de disolución por pérdidas que generen un desequilibrio patrimonial durante los tres primeros años de vida de la startup, siempre que no sea necesario solicitar la declaración de concurso.

Agilización de los trámites

Uno de los grandes avances que trae la Ley de Startups es la agilización en la creación de sociedades. Se podrá constituir una empresa en solo 6 horas y de forma completamente digital utilizando un documento único electrónico, si se utilizan estatutos tipo. En otros casos, el proceso de constitución tomará 5 días hábiles. Además, se eliminan los aranceles notariales y registrales para las empresas que se constituyan utilizando esta vía electrónica.